LUNES, 21 DE
ABRIL DE 2014
El domingo de Pascuas aproximadamente 45 niñas y niños, entre ellos algunos adultos participaron por primera vez del Sacramento de la Eucaristía recibiendo la Comunión: el cuerpo y sangre de Jesucristo.
La ceremonia de la Primera Comunión fue oficiada por el párroco de la Iglesia Inmaculada Concepción de la localidad, Presbítero Jorge Ojeda, frente a la parroquia sobre la peatonal.
En su homilía el pastor de la iglesia sostuvo que tenemos que imitar a estos niños “esa consciencia de pecado, nosotros los adultos tenemos que intentar de recuperar, porque cuando entramos a justificar nuestros pecados es signo de que no nos arrepentimos y si no nos arrepentimos no podemos experimentar la misericordia de Dios”
Por otra parte se dirigió a los padres de los chicos que recibieron la Primera Comunión, manifestándoles que depende de ellos, no solamente de los catequistas, que los niños perseveren en la fe y en la comunión, que aprovechen la inocencia de sus hijos, “tratémosle como persona, son nuestros hijos, merecen el respeto de mamá y papá”.
Deseó que estos niños perseveren en su comunión, aclaró que habló con todos ellos de la necesidad de la oración, de la confesión, de venir a misa, de recibirle a Jesús cada domingo “apoyemos nosotros con nuestra vida y con nuestra conducta, lo que estos niños tienen que hacer”.
“Así como los padres se unieron para la hermosa ornamentación, que diferente será nuestra comunidad si un grupo de padres se animen a ser diferentes”.
“Estos niños querida comunidad necesita de mamá y papá. Estos chicos necesitan comunidad, estos chicos necesitan ver personas adultas felices, comprometidas y sobre todo responsables. Ellos necesitan, no exijamos lo que nosotros no les damos”.
Luego fue el turno de algunos padres, en ese sentido habló el Intendente Nino Portela (dos de sus hijos recibieron la Primera Comunión), comenzó agradeciendo a los catequistas por el tiempo y la dedicación, expresando que los padres sentimos una inmensa emoción por guiar a nuestros hijos por el camino de Jesús.
También hizo una confesión “cuando observo el rostro de la gente y de los padres, mucho no somos, me incluyo, demostrativos, pero la alegría tan inmensa y profunda que sentimos, yo creo que lo debemos a Dios, así que a todos les deseo lo mejor. Conversen hablen y traten de seguirlos, cuando más grande, más cerca de sus hijos”.
Antonio Jara agradeció a Jesús por estar en cada uno de los corazones de los niños y a los catequistas por la enseñanza que les dieron y gracias a ellos recibieron por primera vez la Comunión.
No hay comentarios:
Publicar un comentario